La competencia de la colaboración efectiva no sólo radica en el uso de técnicas y herramientas. La misma parte de la existencia de confianza y se materializa a través de las mismas. Es necesario entonces el fomentar los elementos que desarrollan la misma y/o evitar los comportamientos y actitudes que tienden a destruir la confianza. Todo lo anterior con el reto que significa la virtualidad o presencia remota, pues realmente se necesita que los miembros de un equipo sientan la seguridad de hablar, aportar, disentir u opinar (lo que se conoce como seguridad sicológica), de manera de capitalizar los beneficios de la diversidad del equipo. Experimentar un sentimiento de “nosotros” y de conexión emocional, entendimiento y empatía; son motores esenciales para aumentar la motivación y, por ende, el desempeño de un equipo, aún en condiciones de trabajo híbridas.

Se trata entonces de una nueva realidad que exige maximizar el relacionamiento y conexión de los miembros de los equipos, sobre la base fundamental de la confianza. Como bien se dice “un equipo de trabajo no es un grupo de personas que trabajan coordinadas, sino un grupo de personas que confían entre ellas”. El enfocarse en los elementos que la sustentan o fortalecen debe ser entonces parte fundamental de la estrategia de toda organización. Y para ello hay que invertir tiempo y esfuerzos de una manera sostenida y consciente. En CONTUR contamos con experiencia comprobada al respecto y estamos listos para apoyarle.